viernes, 27 de enero de 2012

Mine, capítulo 4.

Capítulo 4, "Infinito".

Es viernes.
Noel está en su audición con la loca. Le han salido algunos granos en las mejillas de los nervios y tiene las manos manchadas tal vez permanentemente de tinta, según la mamá de Noel y Luce, y no ha podido dormir éstos últimos días.
 Probablemente esté luciendose con Laura.
O probablemente no.
 Sin embargo yo he quedado con Luce en mi casa para una película. Estoy sentada en el sillón comiendo las palomitas antes de que la película comienze mientras Luce pone el CD.
--Oye, a propósito--Le digo-¿Qué película vas a poner?
Ella sonríe.
--Las películas, nena--Me dice, resaltando la primera palabra--No dormiremos esta noche. Veremos películas hasta morir.
La idea no es tan mala.
--¿Y qué películas trajiste, pues?
Ella sonríe de nuevo y me muestra las portadas de seis películas. Arrugo la frente cuando veo "Titanic". Les doy la vuelta y leo la sinopsis.
La fulmino con la mirada.
--¿Me estás diciendo que te vas a poner a mostrarme tus babosadas románticas?
Ella asiente.
--Oh, yeah, baby.
Ruedo los ojos. Ella toma una película sin ver cual es realmente.
 37 minutos después estamos sentadas devorando las palomitas mientras la película que Luce escogió pasa. La chica estúpida, Shay, la protagonista, descubre lo de "La apuesta" (El tema usual, le digo a Luce) y sale corriendo dramáticamente del lugar llorando a lágrima viva.
--¡Baaaahhhh!--Grito--Es basura. No entiendo porqué demonios no puede simplemente marcharse con un poco de dignidad. Que chica tan más estúpida.
 Veo que Luce rueda los ojos.
--Dios, Lena... ¡Está herida! ¡Sale corriendo porque Ethan la ha lastimado!
Arrojo un puño de palomitas a la pantalla, en el momento en el que Shay llora sentada en un árbol.
--¡Mírala! Ella solita está haciendo un pancho del tamaño del mundo.
--Pues yo espero que nunca estés es esas situaciones.
Ruedo los ojos una vez más.
--No me verás así, te lo juro.
Luce me mira por unos segundos.
--¿Eres lesbiana?
Entonces siento ese impulso de ahorcarla.
--Ja, ja, ja. ¿Quieres que te golpee? Porque, oye, lo puedo hacer.
Ella ríe. Entonces sé que me tomó el pelo.
Vemos la telvición y mágicamente ya está Ethan afuera de la puerta de Shay, pidiéndo disculpas.
--¡Dios! ¡Qué película tan más mala!
Luce me mira con cara de pocos amigos.
--¡Verás!--Me dice.
Cuando termina la película, ella reanuda el tema.
--¿Segura que no tienes gustos diferentes? No te he visto con nadie desde que te conozco.
Ruedo los ojos. Creo que ya es un hábito.
--Que no.
--Bien, dáme una prueba.
Miro al techo.
No puedo creer lo que estoy  a punto de hacer.
--Bien, conocí a este chico...
Entonces veo que Luce se pone rígida, mirándome y sus ojos tienen una chispa.
--... Se llama Lucas. Y nos dio por coquetear un ratito.
--¿Y?
--Me dio su celular.
--¿En verdad?
--Yep, pero lo borré.
Tiene la expresion de alguien que quiere golpearme.
--¿Qué tú hiciste qué?
--Que lo borré.
--¿Porqué?
--Simplemente es un desconocido.
Luce tiene la expresión en su rostro de alguien que quiere estrellarse contra un poste.
--¿Qué tú..? ¿Al menos era guapo?
Imagino su pelo rubio y su sonrisa....
--Oh, sí--Le digo--Era como para comértelo.
Ella se da en la cabeza con una almohada, ella solita.
--Demonios, Lena. ¿Si estaba así de bueno porque borraste el celular?
Yo río y me encogo de hombros.
--Tengo planes de morir sola el resto de mi vida con dos gatos. Uno blanco y uno negro.Se llamarán Crema y Chocolate.
Ella me lanza una almohada.
--¡Al menos me hubieras dado el número a mí!
Ella me golpea con una almohada y yo sonrío. Y así es como empieza una pelea de almohadas.

Es sábado por la tarde. Las cuatro. Luce salió de mi casa hace dos horas, planeábamos pasar "Haciendo nada" en mi casa todo el santo día si no fuera porque a la loca se le ocurrió llamarme para decirme de los planes de los cuales nunca me había hablado. Ella dijo algo así como "Fotos", "Te recogemos", "Hermanos franceses", y luego dijo "A las cuatro".
 Realmente no le estaba prestando mucha atención.
Bostezo mientras desperdicio mi día esperando viendo la tele a que Laura llegara por mi.
Entonces oigo una bocina.
Y sé que es ella.
O más bien Sara, junto con la loca, por supuesto.
 Me despido de mi mamá con un beso en las mejillas y luego salgo de la puerta abrochandome mi saco gris.
--Hola, guapa--Me dice Sara.
Le sonrío.
--Hola.
Sin embaro, Laura es más bien de... Los cumplidos para ella misma. Entonces empieza a hablar algo acerca de dos franceses, y que quiere "Ganárselos", y que piensen que ella es "Amable". Realmente no presto atención en lo que está hablando, pero alguna parte de su conversación me llama la atención.
--Espera...¿José tiene hermanos? ¿Tu José?
Ella asiente.
--Y son franceses.
--Más bien tienen la nacionalidad, pero según él dijo no son de ahí, originalmente, quiero decir--Dice Sara
Qué interesante.
--¿Entonces vamos a conocerlos?
Sara asiente.
--Creo que son tres.
Asiento.
--Por cierto, ¿A dónde vamos?
--Sesión de fotos.
Miro a Sara.
-- ¿Disculpa?
Asiente.
--Si... Y es que la otra dama de Honor estará allá, usando un vestido, como tú... Y serán fotografiadas juntas.
Agito mi cabeza.
--¿Pero de qué fregados me estás hablando? ¿No era sólo una, osea, yo? No, espera, también está a niña amiga de Sara que nunca decide pasarse por aquí... ¿Porqué a ella no la arrastran aquí como a mí? No es justo. Espera... ¿Vestidos? ¿Qué vestidos? Yo no traje ningún estúpido vestido. ¿Me estás tomando del pelo? No es gracioso.
Laura suspira.
--Deja de ser tan dramática, niña.
Pienso que si me vuelve a decir "Niña", la ahorcaré.
--No tengo ningún vestido. Además, ¿Para qué quieres tomar fotos de las damas de honor? Que seas tú entonces tal vez sea normal, pero, ¿yo?, oye, ¿Para qué?
--Porque, quiero tener un álbum. En las primeras páginas estarán las fotos de la boda... Luego sólo yo y José... Las damas de honor, y luego mis fotos de estudio... ¡Luego estarán las fotos de nuestros bebés! ¿No te emociona la idea?
 Trago saliva.
Que haya un montón de mini-lauras por ahí, haciendo llorar a otros niños, aventando la comida, detrozando todo... Y que sean mini-lauras (En verdad es sólo eso lo que me tiene de pelos, lo demás me da igual)... No. No me emociona. Pero nada.
Ni un poquito.
En absoluto.
¿Cómo sería que en el mundo hubiera una niña del todo inocente que siguiera los pasos de su madre? Sería como tener a Laura de nuevo.
Trago saliva de nuevo, muy ruidosamente.
Sara me mira por el espejo retrovisor y sonríe, es cuando estoy del todo casi segura de que ella sabe lo que estoy pensando. Y estoy casi segura de la misma manera que tampoco le emociona mucho la idea.
Me quedo callada por unos instantes.
--¿Para qué quieres las fotos de las damas de honor, Laura? Eso no se usa--Dice Sara.
Yo estoy del todo de acuerdo.
--Quiero recordar todo.Quiero que en años, cuando tú y Lena tengan canas y estén arrugadas de pies a cabeza, poder enseñarselos a mis hijos.
Dios mío santísimo.
Quiero golpearla.
En verdad quiero golpearla.
Sara parece compartir de nuevo mis pensamientos.
 Cuando llegamos al estudio, abro la puerta, y veo la sala principal. Veo a José sentado junto con una chica de mi edad. Tiene el cabello castaño oscuro.Como el de José.
José se levanta y me saluda.
--¡Lena!
Me da un beso en la mejilla y le sonrío cordialmente. Miro a la chica, que ahora se ha levantado. Su cabello es lacio, al contrario del mio, y castaño oscuro, veo que ella tiene puesto un vestido corto y dulce de manga larga, tiene más o menos mi altura y unos ojos que me parece que ya había visto antes... Pero, vamos, conozco a personas todos los días.
 La chica me sonríe un poco.
--Ella es Ellie. Es mi hermana.
Laura sonríe al escuchar esa palabra y la abraza. Ellie parece confundida al principio, y luego la abraza un poco. Sara se presenta más tranquila que Laura, y le da un beso en la mejilla. Luego sigo yo, que hago lo mismo que Sara, y Ellie hace lo mismo, porque ambas nos aproximamos a nuestras mejillas al mismo tiempo.
--Soy Sara, la hermana de Laura. Ella es Lena, mi prima.
Ellie sonríe y se rasca la nuca. Cuando levanta la mano veo algo.
Es un tatuaje.
 "Infinito".
Es el signo matemático que representa infinito. Sé que está relacionado con el Ouroboros, pero ese es una serpiente que se come la cola y representa "Eternidad". En cambio, el de Ellie parece un ocho al revés.
 Creo que Laura y Sara también se fijan en ello, porque Laura exclama algo por lo bajo, lo suficientemente bajo como para que nadie la haya escuchado. Sara lo mira cosa de dos segundos. Yo también lo veo. Y lo considero muy bonito.
--¿Cuándo empiezan?--Pregunta José--Yo sólo vine a traer a los niños. Tengo que ir al trabajo.
Laura mira a su prometido y sonríe cordialmente.
--¿Dónde están? Ya los quiero conocer.
--Mi hermano fue por unos cafés--Dijo Ellie.
José asintió.
--Muy bien.
Entonces la puerta detrás de mí se abre y Ellie sonríe.
--Aquí viene.
Me volteo a ver ese cabello rubio que ya había visto antes mientras Ellie le dice:
--Lucas, ¿Trajiste mi pastelillo?

--Sthep Stronger.

1 comentario:

  1. Ho vaya!
    me lo imaginaba, me refiero a que eran hermanos, pero aun así me sorprendió...

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